En el vasto paisaje de la Ribera del Duero, donde la tierra y la vid se funden en una simbiosis perfecta, nace un vino de excepción: Tardeviñas. Este elixir, engarzado en la Denominación de Origen de la Ribera del Duero, es la culminación de un proceso meticuloso que rinde homenaje a la tierra, al clima y al esfuerzo humano.
Un Terroir de Carácter Único
Los viñedos centenarios escogidos para esta vendimia especial se sitúan en las zonas extremas de la Ribera del Duero. Desde los páramos de gravas de Moradillo hasta las soleadas laderas arenosas de Gumiel de Izán, pasando por los bancos calizos de arenas rojas en Baños, cada viña aporta su carácter único al vino final. La altitud, que oscila entre los 800 y 950 metros sobre el nivel del mar, confiere a las uvas una expresión genuina y distintiva.
Una Vendimia Manual y Selectiva
La recolección de las uvas se realiza de forma manual, en cajas de 12 kilogramos, durante la segunda quincena de octubre. Cada majuelo se vendimia en su momento óptimo de madurez, garantizando la calidad y la integridad de la fruta.
Crianza en Barrica: Elegancia y Complejidad
Tras la vendimia, el vino reposa durante 18 meses en barricas nuevas de roble francés y un tercio de roble americano. Este proceso de crianza aporta una elegancia y complejidad excepcionales al vino, realzando sus aromas y sabores.
Tardeviñas: El Vino Propio de Asador Aurora
Es importante destacar que Tardeviñas es el vino de Asador Aurora, proveniente de su propia bodega. Esto garantiza un control absoluto sobre la calidad y el carácter distintivo de cada botella. Puedes revisar la nota de cata del vino en la web especializada Verema.
Disponible en Carta y para Llevar a Casa
Además de disfrutarlo en el restaurante, Tardeviñas está disponible para llevártelo a casa si así lo prefieres. Así, podrás deleitarte con este exquisito vino en la comodidad de tu hogar, compartiéndolo con amigos y familiares en cualquier ocasión especial.
Una Experiencia Sensorial Inigualable
Tardeviñas despliega una intensidad aromática cautivadora, desde un inicio con una intensidad media hasta una explosión final de aromas a medida que se oxigena. En boca, se revela diferente y envolvente, con una sensación dulce y balsámica y un marcado peso de fruta. Los taninos dulces, propios del roble francés, complementan su estructura, mientras que el intenso retrogusto aromático perdura en la boca, recreando los aromas de toffee y frutos negros.
Una Recomendación Final
Por su elaboración ecológica, Tardeviñas puede presentar precipitados propios del vino. Se recomienda decantarlos media hora antes de servir, a una temperatura entre 16 y 17 °C, para disfrutar plenamente de su esplendor.
En resumen, Tardeviñas de la Ribera del Duero es una experiencia sensorial única, que celebra la excelencia vinícola y rinde homenaje a la riqueza del terroir. Sumérgete en este viaje de sabores y aromas, y déjate seducir por la magia de la Ribera del Duero en cada sorbo.
